El error ortográfico que descubrió millonario robo de hackers

Millonario robo de hackers se hizo evidente por un error ortográfico, el cual abrió la investigación.

Parece que van quedando atrás aquellos robos de película en los que un grupo de delincuentes armados  desvalijan la caja fuerte de un banco, pues hoy la tecnología permite a los cibercriminosos dar un golpe bancario tan solo desde la pantalla de una computadora.

Prueba de ello es el reciente robo millonario de hackers, quienes se tomaron US$101 millones del Banco Central de Bangladesh. Lo grave es que el crimen pasó desapercibido durante varias semanas ante los ojos de las autoridades debido a que Atiur Rahman, director del banco, no informó a la policía.

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De acuerdo con declaraciones de Rahman, el ataque se sintió como un terremoto debido a que de un momento a otro habían sido atacados sin saber cómo, quién o por dónde habían actuado los hackers. Hasta el momento se sabe que los delincuentes utilizaron credenciales robadas para que las peticiones de transferencia parecieran legales.

Se tienen registros de hasta 35 solicitudes de transferencias exorbitantes por hasta US$951 millones desde una cuenta que se utilizaba para pagos internacionales.

Sin embargo, no fue hasta que se detectó un error ortográfico en el nombre de uno de los receptores de las transferencias de el Deutsche Bank –quien fungía como intermediario en las operaciones, Así el banco de Bangladesh detuvo el movimiento. Lamentablemente para entonces ya se habían inyectado US$ 101 millones a cuentas en Sri Lanka y Filipinas, de los cuales sólo US$20 millones pudieron ser recuperados en Sri Lanka.

Curiosamente el Banco de la Reserva Federal de Nueva York ya había contactado al banco de Bangladesh debido a que habían identificado varias solicitudes sospechosas en las que se manejaban grandes cantidades de dinero dirigidas a cuentas privadas.

Este se coloca como uno de los más grandes robos a bancos por parte de hackers y una evidencia más de cómo las ciberamenazas pueden ser aún más peligrosas que un grupo de delincuentes que encañona a los cajeros de un banco grande.