Google Car no necesita de conductor en autopistas

Carros autónomos de Google registran una nueva marca este mes, un millón de kilómetros recorridos en autopistas.

El actual desafío es que el carro inteligente reconozca obstáculos dentro de las ciudades

Carros autónomos de Google registran una nueva marca este mes: Un millón de kilómetros recorridos en autopistas. El director del  ambicioso proyecto, Chris Urmson, afirmó que el actual desafío es conseguir resultados similares, pero dentro de ciudades que presenten mayores obstáculos  y un tránsito más complejo.

En las carreteras, y sin manipulación alguna, los ‘carros sin conductor’ ya son capaces de reconocer diversos impedimentos para su circulación como peatones, ómnibus, señales de parada de un guardia de tránsito o los gestos de un ciclista circulando. Por ejemplo, el video de abajo muestra el funcionamiento del software incluyendo los elementos que son monitoreados instantáneamente por el computador. 

Carros autónomos de Google registran una nueva marca este mes: Un millón de kilómetros recorridos en autopistas. El director del  ambicioso proyecto, Chris Urmson, afirmó que el actual desafío es conseguir resultados similares, pero dentro de ciudades que presenten mayores obstáculos  y un tránsito más complejo.

En las carreteras, y sin manipulación alguna, los ‘carros sin conductor’ ya son capaces de reconocer diversos impedimentos para su circulación como peatones, ómnibus, señales de parada de un guardia de tránsito o los gestos de un ciclista circulando. Por ejemplo, el video de abajo muestra el funcionamiento del software incluyendo los elementos que son monitoreados instantáneamente por el computador.

El vehículo modificado por Google fue Toota Prius, equipado con:

Un conjunto de sensores para circular en autopistas públicas sin conductores, un receptor GPS y un acelerómetro.

Un sensor giratorio acoplado al techo del carro capta todo alrededor de 60 metros de la posición del vehículo, construyendo un mapa tridimensional de obstáculos.

Un sensor acoplado en la rueda izquierda trasera mide pequeños movimientos y ubica con precisión la ubicación del carro.

Una cámara instalada cerca al espejo retrovisor interno capta señales de tránsito y puede reconocer peatones, ciclistas y señales de guardias de tránsito.

Cuatro radares, tres delanteros y uno trasero, ayudan a determinar la posición de objetos distantes.