¿Sabes que es una tecnología de audio Hi-Res?
El audio Hi-Res se dirige a una categoría de sonido mucho más nítida para disfrutarla tanto en smartphones como en computadora. Entienda un poco más de esta tecnología aquí.
Una de las tendencias tecnológicas que pretende regresar al mercado es la de la música de alta resolución. La razón obedece a que existen melómanos que no sólo buscan oír música sino que en verdad quieren escucharla en todos el sentido de la palabra, con todos y cada uno de los matices de los instrumentos.
De ahí que diversas empresas tanto de productos –como Samsung y Sony– y de servicios –como Tidal– estén trabajando en tecnologías de sonido de alta calidad, la cual presume de ser muy diferente a la que se escucha en MP3 y CD.
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¿Cómo entender la diferencia respecto al audio tradicional?
Cuando se habla de audio Hi-Res, HIFI o UHD se trata de calidad 96kHz/24bit o incluso superior, valores que representan la frecuencia de muestreo o lo que es igual a el número de veces por segundo en la que el audio es registrada y guardada con un valor numérico.
Quizás suene complicado, pero como usuario lo que más importa es que entre más altos sean estos valores, mejor fidelidad tiene el audio porque se asemeja más a la fuente del audio original.
Puede quedar más claro si entiendes que el audio Hi-Res alcanza valores de hasta 192 KHz/24 bit, mientras que la calidad CD ronda los 44 KHz/16 bit, es decir cuatro veces inferior.
Dentro de la categoría de alta resolución se han desarrollado diferentes formatos y algunos de los disponibles hoy en día son DSS, SDS, WAV y AIFF. Estos archivos de audio al ser de mayor calidad también son más pesados, es por eso que a la par se necesita trabajar en dispositivos móviles que tengan la capacidad de almacenamiento suficiente para que esto no sea un impedimento para llevar música a todos lados con la misma practicidad que ofrece el MP3.
De la misma forma, es necesario considerar que el uso de esta tecnología implica también el uso de audífonos especiales puesto que no tiene mucho sentido invertir en un dispositivo ni en material auditivo de alta resolución si los audífonos conectados no son capaces de decodificar las frecuencias necesarias. Pequeño detalle, ¿no?